Programas – abril 2 2020

Priorizamos las risas y la diversión

Cuando nos preguntan por las actividades en las Aldeas, muchas veces las consultas están enfocadas en tareas y trabajos escolares, pero todos quienes vivimos o hemos vivido con niños, sabemos que los estudios no forman parte de todas las actividades diarias cuando se trata de los más pequeños de edad de la casa. Y más cuando entre una y otra tarea escolar, surgen este tipo de comentarios, ‘como el niño argentino del vídeo, si dijeron que no hay clases, no me molesten con las tareas’.

En la Aldea de Padre de las Casas, donde 31 niños, equipo técnico y cuidadoras viven cuarentena total, se la juegan y le han dado la vuelta a esta situación, buscando mantener un sano equilibrio entre la educación, la distracción colectiva y el ocio. Y lo han logrado gracias a que la mayoría de los niños cuentan con insumos educativos que sus colegios les entregaro. También, cuentan con un computador por casa conectado a wifi, para que puedan experimentar la teleeducación y apoyo de profesionales, aunque de manera natural cada uno sabe navegar por el ciberespacio, pues son nativos digitales.   

Sin embargo, la educación en la Aldea no deja de representar un reto, ya que los niños, niñas y adolescentes que viven actualmente en nuestros Programas, presentan en general un mayor nivel de retraso escolar comparados con la población escolar que asiste a las escuelas públicas y particulares subvencionadas. El no asistir al colegio de alguna forma rompe con rutinas a las que muchos de ellos les costó acostumbrarse e incluso al no contar con un profesor de manera presencial, se les hace más difícil entender diversas materias, pero allí es cuando entra el apoyo pedagógico nuestro equipo técnico, para que el proceso educativo pueda realizarse de la mejor manera posible.

Cuando se trata de distracción y diversión, una de las actividades más resaltantes es un taller de tejido, que imparte una cuidadora mapuche, al que se han unido niños, niñas, adolescentes e incluso colaboradores hombres a quienes les gustó esta iniciativa. Ha resultado todo un éxito dentro del programa, ya que todos están entusiasmados por ver el resultado de sus proyectos de tejido.

En las tardes llega la hora de correr y gritar con la práctica de fútbol en la cancha de la Aldea, mientras que otros mueven el cuerpo frente a una computadora, chocan entre ellos y se ríen, pues por alguna razón siempre escogen los lugares más pequeños de la casa para realizar clases de la Zumba online, junto a una profesora que brindaba estas clases de manera presencial antes de la cuarentena.

Los más pequeños han desarrollado el gusto por los rompecabezas con los que pueden pasar largo rato entretenidos, o ayudando entre todos con un nuevo pasatiempo, como lo es la elaboración de ropa para muñecas y barbies.

Esta Aldea además se caracteriza por contar con varios niños que se destacan en disciplinas deportivas. Por ello, en dos de las casas del Programa hay trotadoras que por estos días son usadas de manera regular. El espíritu fitness impulsado por las redes sociales, ha inspirado al equipo técnico y a las cuidadoras a promover el deporte y la vida sana entre los niños.

Pero la verdad, es que más que mantener a los niños y adolescentes ocupados, el reto para el equipo de Aldeas Infantiles está en garantizar un ambiente de tranquilidad y seguridad, que resguarde el estado físico y psicológico de los niños, siendo este último uno de los que más se puede ver afectado debido a sus historias de vida y los efectos de la pandemia ante tantos días de quedase en casa.

Los niños, niñas y adolescentes necesitan paz y alegría, y por eso continuamos trabajando por cuidarlos desde el cariño, para protegerlos de los efectos de esta situación. Gracias a ti y cada uno de nuestros socios y empresas, su futuro no es tan incierto y podemos asegurarte que mientras estén en nuestro Programas haremos nuestro mejor esfuerzo porque estén tranquilos y protegidos.   

Desde Aldeas Infantiles SOS Chile te enviamos mucha fuerza y cariño y te agradecemos porque gracias a tu apoyo y hasta la fecha no tenemos ningún contagio de COVID-19. Los niños tienen en su mayoría acceso a internet, lo que nos permite que puedan hablar con sus familias y también, teleeducarse y divertirse.

Seguiremos contándote más detalles de cómo los niños y niñas que apoyas mensualmente viven esta cuarentena, junto a las cuidadoras y ahora en contacto tecnológico con sus familias.