En julio de este año, Aldeas Infantiles SOS Chile concluyó exitosamente el Programa de Acompañamiento Comunitario en el macro campamento Balmaceda, una iniciativa que ha estado en marcha desde 2018 y que ahora abre paso a una nueva intervención en la zona. Durante el período comprendido entre 2019 y 2022, el Programa brindó un apoyo integral a las familias y comunidades del campamento, con el propósito de fomentar los derechos de los niños y niñas que se encuentran en situaciones de exclusión y riesgo social, evitando la violación de sus derechos en sus hogares y entornos locales.
A lo largo de su funcionamiento en esta comunidad, el Programa atendió a un total de 1.118 participantes, entre ellos 566 niños, niñas y adolescentes, además de 552 adultos. Enmarcado en los Programas de Fortalecimiento Familiar (PFF), este proyecto dejó una profunda impresión en la comunidad del macro campamento Balmaceda.
El proceso preventivo y de fortalecimiento generó un impacto significativo en la vida de los residentes del campamento. Trabajando conjuntamente con 644 mujeres y 474 hombres, se concentró en prevenir la pérdida del cuidado parental, fortalecer las estructuras familiares y empoderar a las comunidades locales. El objetivo central consistió en asegurar los derechos fundamentales de los niños, niñas y adolescentes que viven en estas circunstancias.
Para María, una de las participantes del Programa, el trabajo de Aldeas Infantiles SOS ha sido un factor transformador en su vida: "El trabajo de Aldeas es muy bueno, porque realmente se preocupan de la gente, de ayudar con los niños y en muchas cosas más de los hogares". Ella, que ingresó al Programa de Familia Focalizada de manera voluntaria, compartió su experiencia: "Me ha ayudado a conocer el tipo de familia que uno tiene y en qué situación se encuentra, hay varios tipos de familia y cómo uno debe afrontar esos problemas que uno tiene con los hijos. A veces como madre, en el hogar y sin trabajar, se comete el error de agarrarla con los hijos o de renegar. Los nervios estresan, pero en esas clases (las del Programa de Familias Focalizadas) nosotros aprendimos cómo debemos controlar esos instintos de reacción contra la familia, para ser mejor esposa y mejor madre, y enseñarles a nuestros hijos de mejor forma.”
El Programa de Fortalecimiento Familiar de Aldeas Infantiles SOS inició sus labores en 2018 a partir de un diagnóstico comunitario que identificó la necesidad de adoptar un enfoque colaborativo en el área. La colaboración con los comités de vivienda y las juntas de vecinos permitió abordar y mejorar factores de riesgo tanto a nivel comunitario como familiar.
Temas cruciales como la migración irregular, la violencia intrafamiliar, la falta de organización comunitaria y el acceso limitado a la atención médica preventiva actuaron como factores determinantes que impulsaron la necesidad de un enfoque colaborativo y de intervención.
El director del Programa, Elías Huerta, afirmó que “han sido cinco años de trabajo y aprendizaje diario para todos los participantes y para nosotros como equipo, por eso hoy debemos plantear brindar el mismo apoyo a una nueva comunidad en la que podamos intervenir y apoyar a las familias, para que adquieran las herramientas y conocimientos de crianza y protección de derechos que promovimos en el Macro Campamento Balmaceda, una comunidad con la que siempre estaremos agradecidos por su apoyo y recibimiento”
El plan de acción de cinco años abarcó diversas actividades, incluyendo diagnósticos comunitarios, la creación de una escuela de fútbol, el establecimiento de un comité comunitario de emergencia, puntos de apoyo escolar, asesoramiento a las comunidades e incluso la gestión de regalos navideños.
Este emocionante proceso que involucró a 24 comunidades presentó su cierre oficial el 12 de julio en la Sede del Instituto Profesional AIEP de Antofagasta. La culminación de este capítulo marcó un hito en la misión de Aldeas Infantiles SOS Chile de fortalecer familias y comunidades para garantizar el bienestar y los derechos de los niños y niñas en situaciones de vulnerabilidad.
Hoy el Programa de Fortalecimiento Familiar se prepara para empezar un nuevo proceso de intervención en Nuevo Latir, Flor del Norte y Adrian Cony, tres comunidades de Antofagasta, en las que esperan brindar apoyo y acompañamiento a las familias, y repetir con éxito las acciones logradas en el Macrocampamento Balmaceda.